Después de 9 meses en el vientre materno, este bebé recién nacido se niega a que le separen de su madre.
Con tan solo unos segundos de vida, no quiere dejar a su madre sola en la sala de partos y se aferra a ella hasta que la enfermera le deja estar unos minutos más tocándole la cara.
Una imagen que enternece a todo el que lo ve y que destaca el fuerte vínculo maternal que se produce durante el periodo de gestación.
fuente: que.es
maravilloso!!!
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