Por Redacción LAVOZ
Un niño de dos años, que hace una semana fue picado por una víbora yarará, se encuentra internado en el Hospital de Niños.
El ataque se produjo en Athos Pampa, localidad de Calamuchita, cuando el pequeño estaba por subir al auto con sus padres.
Sandra Giunta, del área de Toxicología del hospital, dijo a La Voz que "el nene ya está en sala común y con buen estado". Fue picado de noche, en un sector que, según manifestaron sus padres, no eran pastizales.
Luego de ver la picadura en el empeine fue trasladado al centro de salud de la localidad en donde recibió tres ampollas y luego fue derivado al Hospital de Niños de Córdoba, en donde se aplicaron otras tres.
Giunta explicó que la víbora yarará es el ofidio que más pica en la zona serrana de Córdoba porque logra camuflarse rápidamente.
Medidas preventivas
La doctora sostuvo que "lo más importante es estar con botas y no ojotas en la zona serrana".
"No caminar sobre pastizales y si se va a dormir en una carpa mantener todo ordenado, siempre cerrado. Lo mismo en una casa. Mantener las puertas cerradas porque los ofidios buscan lugares frescos y mantener limpios los alrededores de las casas, evitando altos pastizales", indicó.
Las víboras yarará producen con su picadura un dolor muy intenso que luego se convierte en una inflamación y puede generar un hematoma. Debe ser tratada con urgencia porque afecta la coagulación de la sangre, con la posibilidad de hemorragias internas graves.
Alacranes
En tanto, otro niño de dos años permanece internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Niños tras haber sido picado por un alacrán venenoso. "Recibió seis ampollas y está estable", dijo Giunta.
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