17 enero 2014
CNN) – Se ha iniciado la búsqueda de los asesinos de dos grullas trompeteras extremadamente poco comunes, a las que se les disparó mientras pasaban el invierno en Kentucky.
Se cree que les dispararon a las aves de forma ilegal en noviembre, según informó el jueves el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos y el Departamento de Recursos Naturales y Pesca de Kentucky.
Ahora se ofrece una recompensa para ayudar a localizar a los asesinos.
Las grullas trompeteras son las que están en mayor peligro de extinción de todas las especies de grullas, según la publicación, y están protegidas por dos leyes federales.
Un poco menos de 500 de estas aves de patas largas viven en los Estados Unidos. Siete de ellas se encontraban en Kentucky este invierno.
La primera ave fue reportada como herida el 25 de noviembre en el condado de Hopkins, según el comunicado de prensa. Dos días después fue rescatada debido a que estaba muy débil, pero la parte superior de una pata estaba destrozada y tuvo que ser sacrificada.
Luego los investigadores encontraron los huesos de la pareja del ave, a unas 5 millas del lugar donde fue descubierta la primera grulla.
Las aves, a las cuales se les había colocado radio transmisores, habían llegado a Kentucky - donde habían pasado los dos inviernos anteriores– recién a mediados de noviembre.
Según el diario Courier-Journal de Kentucky, el macho de la pareja llegó a ser bien conocido por los residentes del área de Louisville en el 2007, cuando se quedó atrás durante su primera y difícil migración al sur.
La recompensa por dar información que conduzca al arresto o condena de los responsables actualmente se mantiene en 7.200 dólares y las contribuciones siguen llegando, expresaron los funcionarios de vida silvestre.
Cualquier persona que tenga información debe ponerse en contacto con el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos y el Departamento de Recursos Naturales y Pesca de Kentucky.
La pena por matar una grulla trompetera es una multa de hasta 100.000 dólares y un año de prisión.
CNN
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