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13 marzo 2015 - En la localidad gallega de Sada, A Coruña, dos familias deberán deshacerse de sus perros después de que la denuncia de un vecino haya sido aceptada por la Audiencia Provincial. Al parecer, el afectado tiene una "fobia canina grave debidamente diagnosticada" que le hace imposible convivir con perros en su mismo edificio.
En un principio, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Betanzos desestimó, en julio de 2014, la demanda del afectado por considerar que no ejercitaba la acción "en beneficio de la comunidad" sino por "interés personal suyo al padecer una canino fobia".
Sin embargo, la Audiencia Provincial ha dictaminado recientemente que el denunciante sí busca el beneficio de la comunidad, además de el personal, ya que se ampara en el cumplimiento del Reglamento de Régimen Interno de la comunidad de vecinos, que en su artículo 16 dice explícitamente que "se prohíbe la tenencia en los apartamentos o fuera de ellos de perros, gatos o cualesquiera otros animales que puedan causar molestias, suciedades o ser motivo de peligro o riesgo para las personas".
Por el momento, los afectados piensan en recurrir ya que el tribunal apunta que los demandados pueden provocar la "modificación de tal precepto" y que la junta de propietarios "se pronuncie de nuevo", o incluso podrían también solicitar "medidas cautelares".
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