Se le ha retirado el arma con la que supuestamente hizo los disparos y queda a disposición del juzgado para ser procesado
JUAN ESTEBAN POVEDA | JAÉN@povedaje
26 enero 201502:21
La Guardia Civil ha imputado a un vecino de Jaén de 66 años de edad como presunto autor de un delito de maltrato de animal doméstico, al causar la muerte a un perro de raza mastín. Según informó ayer el Instituto Armado en una nota, le pegó varios tiros con una escopeta de caza. Ha trascendido que el imputado no es el dueño del animal. Es vecino del dueño en la zona de los puentes en las inmediaciones de la capital.
Tras tener la Guardia Civil conocimiento de la muerte de un animal se abrió una investigación que determinó la supuesta autoría. Además de la imputación penal, los agentes que intervenían procedieron a retirarle al hombre el arma con la que presuntamente causó la muerte al animal.
Los hechos han sido puestos en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén, de guardia esta semana, donde se instruirán diligencias para procesar si procede al supuesto autor de la muerte del animal.
En los últimos meses la Guardia Civil ha intervenido en sucesos relacionados con malos tratos a animales domésticos en Jódar, Villacarrillo y la comarca del Condado. El delito de maltrato a animales domésticos es reciente en el Código Penal español. Se incluyó en los años 90. Aunque hasta 2004 no entró en vigor tal y como se aplica actualmente.
Hasta 2009, sin embargo, no hay ningún caso que haya trascendido con resultados en los tribunales de la provincia. Ese año se produce una primera condena, contra un hombre que mató con una motosierra a un perro que estaba peleando contra el suyo. La decisión de la Fiscalía y de la Guardia Civil, las denuncias de organizaciones protectoras de animales y la mayor sensibilidad social han propiciado acusaciones y juicios. Hay ya más de media docena de condenas firmes dictadas en la provincia.
Entre 2012 y los seis primeros meses de 2013 Fiscalía había formulado nueve escritos de acusación por malos tratos graves a animales domésticos (casi siempre perros). Palizas que les acarrearon lesiones graves o incluso la muerte. En ese periodo se habían dictado en los tribunales cuatro sentencias condenatorias. Y ha seguido produciéndose.
La última conocida se refiere a un hombre que ahorcó a un perro de su propiedad en el paraje conocido como Camino de la Luz de Cazorla porque «lo tenía hasta los cojones y solo hacía dar por culo y se comías las gallinas». Le cayeron tres meses de cárcel por un delito de muerte de animal doméstico. Otra reciente, saldada con trabajos a beneficio de la comunidad, acabó con la condena de una pareja de Linares que admitió que habían intentado ahorcar a un perro porque había mordido a un niño.
Hay varios casos que esperan juicio. Uno de los más llamativos es el de una mujer imputada por castrar «a lo vivo» a un perro, al que ató una goma al escroto, donde hizo además una incisión y apretó la goma para amputar los testículos del animal, que escapó y fue salvado por un veterinario de Torredelcampo. El perro fue devuelto a su dueña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario