27 noviembre 201400:20
A 'Teddy' lo arrojaron a las aguas de la playa de El Arbeyal después de que muriese ahorcado. Así lo ha determinado la necropsia practicada por el veterinario una vez que la Policía Portuaria llamó a sus apenados propietarios para confirmarles los peores augurios: su perro había muerto, o para ser más exactos, lo habían matado.
El trágico final de este caniche de ocho años comenzó a fraguarse el sábado por la tarde, cuando aprovechó que se había abierto la puerta de su casa de Jove para escaparse. Nunca lo había hecho, pero ese día salió y acabó en La Calzada, en los alrededores de la iglesia de Fátima y el parque de El Cerillero. Es ahí donde un testigo asegura haber visto a un joven corriendo detrás del animal, que huía asustado. El chico consiguió darle alcance y cogerlo en brazos. Tal y como quedó reflejado en el estudio del cadáver, murió un día después, el domingo por la tarde. Lo ahorcaron. Se desconocen las circunstancias que rodearon el fallecimiento del perro, aunque lo que sí está confirmado es que se trata de una muerte violenta.
Para entonces, sus propietarios habían sembrado la zona oeste con carteles con la imagen de la mascota. Durante tres días lo buscaron día y noche. El lunes por la mañana un piragüista sacó el cadáver desde el mar a la playa de El Arbeyal. Quien lo mató intentó deshacerse de sus restos arrojándolo al mar. La Policía busca ahora testimonios para identificar al individuo que lo recogió.
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