Se escapó de su dueño -aparentemente un carrero- y se metió en un playón del centro de la ciudad. Al principio estaba asustado pero lograron calmarlo y se quedó en el lugar. Por no saber cómo actuar, pidieron que intervengan agentes de la Policía
Un pequeño caballo encontró refugio en un estacionamiento del centro quilmeño tras soltarse de un carro y galopar durante varias cuadras hasta llegar al playón en donde, tras algunas horas, lograron calmarlo y atarlo para que no vuelva a escaparse hasta tanto quede a cargo de la Policía.
La sorprendente situación se dio pasado el mediodía de ayer, bajo una intensa lluvia. Si bien nadie aseguró como se inició el hecho, los ocasionales testigos indicaron que una pelea entre "carreros" habría derivado en este extraño suceso.
Lo cierto es que ayer, el encargado del estacionamiento de Garibaldi entre San Martín e Hipólito Yrigoyen, en el centro de Quimes, daba cuenta de que en momentos en que la lluvia era intensa se vio sorprendido con la llegada a de un pequeño caballo que, a la carrera, ingresó en el lugar en el cual había varios vehículos.
Ante esta situación, la persona a cargo del lugar, cerró de inmediato el portón de rejas y el animal quedó atrapado allí. Tras varios minutos, el equino se fue calmando para luego poder atarlo y esperar la definición del tema.
"Me tomó por sorpresa, no sabía qué hacer, cerré el portón y quedó como en una gran jaula", comentó el encargado del estacionamiento, quien luego agregó: "ante la desesperación cuando pasó otro carro le pedí a los chicos que estaban ahí, que me ayuden y ellos se encargaron de calmar al caballo y atarlo esperando que alguien venga por él".
Hasta pasada la media tarde, todo se había calmado y se esperaba una definición por parte de la Policía que tenía que actuar en el lugar, llevarse el animal y aquel que lo reclame tendrá que presentar la documentación pertinente que lo acredite como propietario del mismo.
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