Le rompieron el corazón, pero ahora se lo han devuelto.
Por Camila Londoño
Una perrita estaba navegando con su familia en el río Chao Phraya en Bagkok, Tailandia. De repente,se calló del bote y luchando por su vida, logró nadar hasta el muelle Rama V pier. Allí se quedó. Convencida de que su familia volvería, esperó y esperó. Todos los días, durante más de un mes, se quedó en el muelle mirando hacia el horizonte, pero la familia nunca regresó.
¿Por qué la abandonaron?, ¿fueron ellos quienes la lanzaron al agua? No se sabe, pero sea cual sea la razón, nada lo justifica.
Durante el tiempo que estuvo allí, ella encontró la forma de alimentarse mientras que esperaba.
Y de vez en cuando, dependía de la amabilidad de algún extraño.
Por fortuna, su suerte cambió y una nueva familia le ofreció un hogar con la promesa de nunca más dejarla sola.
Su nueva familia la llamó: Tha Ruea que en español significa muelle. Aquí está, camino a su nueva casa:
Ahora, Tha Ruea vive feliz, en un gran lugar con piscina incluida.
No podría estar más agradecida.
fuente: upsocl.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario