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GRACIAS POR VISITARNOS - Las mentes más profundas de todos los tiempos han sentido compasión por los animales. Friedrich Nietszche

viernes, 14 de marzo de 2014

En los festejos del “último primer día de clases" En la puerta de la basílica, alumnos del Sagrado Corazón hicieron explotar a un perro. Amén

El UPD ya es una marca registrada: el festejo de los alumnos del Sagrado Corazón.
LA PLATA – BUENOS AIRES –A RGENTINA
El UPD ya es una marca registrada. Con el boom de las redes sociales, el festejo por el “último primer día de clases” se expandió en todos los colegios de la región. En algunas celebraciones los límites estuvieron difusos: alumnos del Sagrado Corazón de Jesús le arrojaron petardos a un perro, que finalmente murió desangrado en la intersección de las calles 58 y 9 y Diagonal 73

La algarabía de los jóvenes no tiene reglas, el único lema a respetar es “previar desde la noche anterior, meter fiesta en las adyacencias del colegio e ingresar al primer día del ciclo lectivo sin dormir”. La ausencia de las autoridades de varias instituciones privadas y de los padres encendió una luz de alerta.

La respuesta de los directivos de distintos colegios fue la misma: “Están fuera de la escuela y a cualquier horario. ¿Qué podemos hacer nosotros?”, se preguntaron, sin saber cómo resolver el descontrolado festejo que en varias escuelas resultó conflictivo. A pesar de vestir los uniformes de las instituciones privadas, las sanciones nunca llegaron.

Enceguecidos por la celebración, dos muchachos del Sagrado Corazón fueron los que no tuvieron piedad de un perro que se acercó al festejo, atraído por el ruido. Las versiones son dos: vecinos aseguraron que le tiraban los petardos al animal y luego se reían, cuando quedaba herido tras la explosión: "Llegaron a ponerle un explosivo en cada oreja y otro en la boca", reconocieron.

En su defensa, los jóvenes sostuvieron que ellos tiraban las bombas y el can las mordía.

Lo cierto es que el perro terminó gravemente herido y minutos más tarde yacía sin vida en la vereda, a pesar que un parroco lo llevo de inmediato a la guardia de la Facultad de Veterinario. El hecho conmocionó a los transeúntes que se dirigían a primera hora a sus trabajos. Uno de ellos manifestó en diálogo con NOVA: “Algunos de los jóvenes se retiraron impactados, la sangre del pobre animal les hizo ver el límite; pero otros se reían a carcajadas, festejando vaya uno a saber qué”.

Enfrente de la histórica basílica de más de 100 años que pregona los valores de Don Bosco y María Auxiliadora, los alumnos del Sagrado Corazón de Jesús hicieron explotar a un perro. Amén.

Quejas de vecinos

La sorpresa se adueñó de muchos habitantes del microcentro platense, que se despertaron de manera exaltada durante la madrugada del lunes y del martes cuando una serie de explosiones hicieron retumbar las paredes. Se asomaron y observaron a una muchedumbre de jóvenes cantaban al ritmo de batucadas, flameando banderas al aire y prendiendo bombas de estruendo.

“Por la zona de Plaza Moreno pasó un grupo de jóvenes con mochilas, tomando cerveza y gritando desaforadamente. Uno quedó rezagado, vomitando en el pasto”, expresó una señora que vive en un edificio aledaño.

Algunos vecinos pusieron el grito en el cielo y se quejaron por los ruidos molestos. Otros, interpretaron que los docentes habían llegado a un acuerdo salarial con las autoridades. Pero el descontrol estaba lejos de esa hipótesis: alumnos de sexto año festejaban su “primer último día de clases”.

fuente: novalaplata.com


La mentira tiene patas cortas: el perro del Sagrado Corazón nunca fue atendido y no aparece
Tras explotarle en la boca la bomba de estruendo lo arrastraron 100 metros y lo dejaron tirado en 58 y diagonal 73. La facultad de Veterinaria niega haber atendido a un can herido por pirotecnia. La cámara del MOPU los habría captado.

Mintieron descaradamente. Tuvieron la mala fortuna de que uno de los empleados de la cochera de 58 y diagonal 73, en cuyas inmediaciones tiraron el cuerpo tapado con un cartón, fuese estudiante de veterinaria. El muchacho contó: “el perrito estaba destrozado. No tenía dientes, la mandíbula hecha pedazos. Perdía sangre por todos lados. Ni gemía, ya. Por lo que sé, ya no había forma de salvarlo”.

Nadie llevó a ningún animal herido por pirotecnia la facultad de Veterinaria, el lunes por la mañana, después de que un grupo de “muy buenos alumnos” de uno de los últimos cursos del colegio Sagrado Corazón, tiraran bombas de estruendo en las inmediaciones de ese prestigioso colegio religioso de la Ciudad, en diagonal 73 y 9. 

Festejaban su “último primer día de clases”. Un rato antes, durante la madrugada-noche, habían estado en el boliche Circus, donde vaya a saber qué ley u ordenanza les habría permitido permanencer allí hasta el amanecer. ¿Si tomaron alcohol?. 

No puede saberse. Lo que se sabe es que la ley prohíbe venderle alcohol a menores de edad y es de esperar que en Circus hayan cumplido con esa norma. En todo caso, teléfono para usted don Gustavo Luzardo, titular de Control Urbano. 

No hay forma de probar si esos menores de edad estaban alcoholizados, pero sí hay evidencias de que estaban muy alegres y que expresaban esa alegría cantando, riendo y arrojando bombas de estruendo a las 7 y media de la mañana de un lunes laborable. El perro los seguía desde el boliche, distante a pocas cuadras de donde ocurrió el hecho. Intentaron espantarlo pero como buen perro de la calle, falto de amor y afecto, el tonto les respondió moviéndoles la cola. 

Cuentan que entonces uno de estos “buenos chicos”, ante la insistencia del pobre animal, dijo algo así como “dejalo, que se joda por boludo”. Y entonces otro cancherísimo compañero suyo prendió el petardo-mortero, una forma de pirotecnia que al estallar te hace saltar de la cama. 

El pobre animal mordió el cohete antes del estallido. Le explotó prácticamente en la boca. Se escucharon varios “uuuuuh, boluuuudo” y alguna que otra risotada estúpida. El perrito quedó hecho un bollo de pelos y sangre en medio de la diagonal 73. El periodista Fernando Tocho, de labuenainfo.com, tomó fotos del manchón de sangre junto al que todavía pueden verse restos de la pirotencia que usaron. Y fotografío también el recorrido que hicieron con el cuerpo del pobre animal, ya moribundo. 

Lo tomaron de una de las patas traseras que se había salvado del baldazo de sangre (no vaya a ser que los niños se mancharan la ropita) y lo arrastraron 50 metros hasta la esquina de enfrente de colegio. Quisieron seguir con el festejo pero la imagen del perro allí tirado les dio cargo de conciencia. 

Entonces hicieron el esfuerzo y lo arrastraron un poco más por la calle 58 hacia el lado de 10. Lo dejaron medio escondido junto a las ruedas de un auto estacionado. Las manchas de sangre y el testimonio de la gente de la cochera son irrefutables. Como buenos cristianos que son, lo taparon con un cartón o una bolsa que encontraron tirado. 

Fue entonces cuando una vecina, llena de horror, avisó que el perrito aún se movía. En la caja de una camioneta se lo llevaron. Un anónimo dijo que las cámaras del sistema municipal MOPU tendría las imágenes. YA hay gestiones para obtenerlas, si es que existen. Mientras tanto, cabe recordar que las madres, padres, tías y vaya a saber cuántos más que escribieron insultos hacia Labuenainfo y a Diario Full dijeron que el perrito “fue llevado a la facultad de veterinaria, donde se encuentra estable”.

Una vieja rufiana tuvo, incluso, el tupé de escribir: “, mentirosos, amarillistas, ya van a ver las fotos cuando las subamos”. No sabemos bien qué fotos van a subir. Ojalá sean las fotos del perrito. Vivo. En la facultad de Veterinaria de la UNLP, institución a la que esta gente involucró sin ningún miramiento, dijeron claramente que “acá no se atendió a ningún perro herido por pirotecnia”. 

En el ruido de una cadena de silencio que empieza a cortarse, un supuesto padre de un supuesto alumno dijo en un programa de radio que “el perro ya estaba muerto”. Una persona que trabaja cerca de la estación del tren universitario y que no quiso identificarse por miedo a meterse en problemas, dijo haber visto de una camioneta bajar un bulto, junto a la vía, el lunes por la mañana. 

Anotó el número de la patente. Pero tiene miedo y nadie está obligado a tener actitudes heroicas, dice la ley, según me contó una vez un amigo abogado. Lo cierto es que esa es la “inmediata atención” que, segun dijeron, recibió el perro masacrado por estos imbéciles. Seguimos esperando las fotos del perrito que “está estable, ya van a ver, mentirosos”, como incluso le habrìan dicho a las autoridades del colegio a las que, por lo visto, les han tomado soberanamente el pelo. 

Seguimos esperando que aparezca el perro "estable y reponièndose", como dijo otra cómplice de esta historia que da asco. Por lo visto, lo ocurrido fue un accidente. No lo mataron a propósito. No son asesinos torturadores de animales, como indicaban las primeras versiones a las que Diario Full hizo mal en creer. Fue un accidente. Pero un accidente estúpido provocado por pibes a los que se les ha brindado en estos años una excelente instrucción. La vida los ha premiado, por suerte para ellos , con una instrucción de excelencia. 

La que puede darles uno de los mejores colegios de La Plata, con el valor agregado, si se quiere, de contar en esa instrucción con los valores de la Fe Cristiana. Esos colegios donde sus instructores nunca hacen paro. A veces porque no quieren y otras porque no pueden. Pero por lo visto, instrucción, no es lo mismo que educación. 

Esos padres que escribieron a la Buenainfo.com y a Diariofull.com, insultado a sus periodistas y algunos de ellos dando clases de cómo hacer periodismo, quizá sean los mismos que todos los días le joden la vida al prójimo estacionando en doble fila porque alguien desde el Poder tolera que eso ocurra frente a algunos colegios privados de la Ciudad. Son gente decente, nadie lo duda. Son buena gente. Son gente que vive en la absoluta legalidad. Pero, como decía Emmanuel Kant, una conducta perfectamente legal puede, al mismo tiempo, ser perfectamente inmoral.

fuente: diariofull.com.ar

foto de face de uno de los perritos lastimados en el festejo

2 comentarios:

  1. Pelotudos es poco........... la maldicion caerá sobre todos los culpables, me encantaria hacer otra cosa.............

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  2. Decirles Pelotudos es poco.......... que la maldicion caiga sobre TODOS los culpables... me encantaria hacer otra cosa, pero...

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