Cazadores le arrancaron de manera brutal sus cuernos y fue rescatada y operada por veterinarios buscando que sobreviva y pueda reproducirse.
Por Redacción Día a Día
Voluntarios y veterinarios de la asociacion Saving the Survivors localizaron a Hope, una hembra de rinoceronte blanco de cuatro años que lucha por su vida.
Un grupo de cazadores furtivos habían inmovilizado al animal con un dardo anestésico y luego le arrancaron de manera brutal los cuernos.
Hope (Esperanza) se despertó con una herida abierta que le afectaba toda la parte frontal, dejando al descubierto las fosas nasales.
El animal fue descubierto dos días después de la agresión, cuando ya había perdido mucha sangre y la herida -de unos 50 por 28 centímetros- presentaba signos evidentes de infección.
Pese a la gravedad del pronóstico, Hope fue operada y los veterinarios consiguieron aplicar en el hueco de los cuernos un molde de fibra de vidrio con tornillos de acero.
"Si podemos salvar a Hope, ella podrá tener descendencia y habremos contribuido a la supervivencia de la especie", explicó Gerhard Steenkamp.
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