La canciller da por “inaceptable” una de las razones por las que Garzón no aceptó la embajada en Brasil: el bienestar de su perro.
Angelino, en entrevista con Maria Jimena Duzán que fue publicada en SEMANA, aseguró que “renunciamos a la embajada porque el perro que está en esta foto está muy peludo y el clima caliente de Brasilia le podía hacer daño”.
Tal argumento indignó a la canciller Holguín, quien no sólo descalificó al vicepresidente al señalar que le genera “mucha vergüenza” el pronunciamiento de Angelino, sino que ofreció excusas al gobierno de Brasil.
“Brasil no ha podido comportarse mejor con el vicepresidente, porque ha sido imposible, para una respuesta tan desentonada como que es un tema del perro y del calor de Brasil. La verdad, yo sí lo siento mucho con Brasil, me da mucha vergüenza y les ofrezco todas las excusas al gobierno brasileño y a su pueblo. Me da mucha tristeza este tipo de respuestas del vicepresidente”, dijo Holguín.
La canciller, además de mostrarse bastante decepcionada de la respuesta de Angelino, recordó que el vicepresidente les mandó tanto a ella como al presidente Santos una carta en la que decía que era por motivos personales, “la verdad es que uno se imagina que motivos personales son algo realmente más de fondo”.
Angelino no le puso punto final a la controversia y este martes insistió en que razones personales y familiares, que en su momento las dirá, lo llevaron a no aceptar la embajada. Incluso aseguró que Orión es parte de su familia, y para donde él vaya irá el perro.
El vicepresidente controvirtió a Holguín al señalar que su negativa a aceptar la embajada en nada afectará las relaciones con Brasil. Dijo que el gobierno de ese país, y uno de sus expresidentes, Luiz Inacio Lula da Silva, saben que siempre trabajará por fortalecer las relaciones bilaterales. “Esas buenas relaciones no se van a debilitar por la decisión que yo tomé, de pronto (ellos) las han entendido mejor. Vamos a terminar el gobierno, y muchos acá no me han sabido entender”, dijo Angelino.
'Rueda suelta'
Este es un nuevo capítulo en las diferencias entre el vicepresidente Angelino y el gobierno Santos. Una especie de matrimonio por conveniencia que se inició hace cuatro años, cuando el entonces candidato Juan Manuel Santos lo designó como su fórmula vicepresidencial.
Desde entonces Angelino fue calificado como una rueda suelta dentro del Gobierno, pues sus posiciones en diferentes materias se asumieron como contradictorias con el Ejecutivo, además de lanzar críticas a varios funcionarios del Gobierno.
Garzón decidió no aceptar la embajada de Colombia en Brasil precisamente horas después de que Santos presentó a Germán Vargas Lleras como su fórmula vicepresidencial de cara a la reelección.
Tanto Santos como Vargas coincidieron en darles un giro a las labores de la Vicepresidencia, al señalar que el objetivo sería que esta dependencia fuera más activa, tuviera metas calificables, y Vargas Lleras marcó distancia con Angelino al señalar que en su caso sería un soldado del Gobierno y no se dedicaría a pronunciar frases picantes.
Además, ambos coincidieron en anunciar una reforma política que incluso se ocupara de la eliminación de la Vicepresidencia. Eso, sin duda, generó cierto malestar en Angelino, que aunque argumentó motivos personales para no ir a Brasil, su negativa fue entendida como una enérgica reacción a los dardos en su contra.
Entretanto, la canciller Holguín dio a conocer el nombre de Patricia Cárdenas Santamaría como la nueva embajadora de Colombia en Brasil. Cárdenas se desempeñó como titular de la legación colombiana ante el gobierno de Japón desde el 15 de marzo del 2007. Es ingeniera industrial egresada de la Universidad de Los Andes, con estudios de especialización en Desarrollo Económico en la Universidad de Oxford (Reino Unido).
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